Guía Turística de España |
Montañas con cimas nevadas, lagos limpios y cristalinos, playas de belleza insuperable, ciudades históricas y cosmopolitas y una cocina fantástica.... Puede que esto no le suene como la España a la que estamos acostumbrados, pero si va un poquito más allá de lo que cuentan las guías de viaje, entonces encontrará uno de los mejores destinos de toda Europa. Este país, que ha sido un imán turístico desde los años 60, también es una tierra romántica llena de grandeza y de una historia feroz que todavía pervive en sus habitantes. Aunque la imagen estereotipada de las corridas de toros y la sangría continúan existiendo, al igual que la de las Costas, repletas de turistas rojos como gambas, España tiene muchísimo más que ofrecerle. Madrid no sólo es la capital de España, sino que también es su centro neurálgico. La capital del país fue específicamente construida para ser el centro geográfico de la Península Ibérica, el Kilómetro Cero. A diferencia de los suburbios, la ciudad ha mantenido su arquitectura de edificios bajos, parques verdes, palacios y galerías de arte. Los bares de tapas abundan por toda la ciudad, y, cuando el calor se le haga insoportable en el parque del Retiro, siempre podrá refugiarse en el aire acondicionado del Museo del Prado. Diríjase caminando hacia el oeste y tome el funicular hasta la Casa de Campo, donde se vivieron los últimos días de la Guerra Civil española. Visite el Templo Debod, un auténtico monumento egipcio rescatado de las arenas del desierto. A una hora en coche encontrará Toledo y Aranjuez, y un poco más al sur los amplios y llanos parajes de La Mancha. Aquí encontrará una infinidad de cosas que ver y hacer, aunque asegúrese de que, como mínimo, ¡le dedica una semana! Al norte de Madrid se encuentra la región vinícola por excelencia, La Rioja, y si continúa en dirección a la costa entrará en el País Vasco. El norte es pintoresco, con altas montañas y una accidentada línea costera. Según viaje hacia el oeste del país cruzará el paisaje alpino de los Picos de Europa y las idílicas tierras de labranza de la ‘España verde’, hasta llegar a una costa con pequeños pueblecitos pesqueros y playas de arena. No hay lugar como este para escaparse de verdad de la vida urbana. Si viaja hacia al sur desde la famosa ciudad de peregrinaje, Santiago de Compostela, podrá reseguir la larga frontera que separa a España de Portugal. Este accidentado terreno, que le ofrece una amplísima variedad de viejos castillos, fue el escenario de muchas de las históricas guerras napoleónicas que tuvieron lugar en la Península Ibérica a principios del siglo XIX. El sur es la zona turística por excelencia. Como complejos turísticos de máxima popularidad en la Costa del Sol cabe destacar Málaga, Marbella, Fuengirola y Torremolinos. No obstante, si se dirige al interior encontrará las auténticas joyas, como Sevilla, Córdoba y, claro está, el fantástico palacio morisco de La Alhambra, en Granada. Continúe remontando la costa mediterránea, pasando por la Costa de Almería y el gran puerto de Cartagena, y llegará a las otras dos zonas turísticas por excelencia, la Costa Blanca y la Costa Brava. A poca distancia de la frontera francesa encontrará la ciudad de Barcelona, capital de Cataluña y segunda ciudad española, ¡aunque si escucha a sus habitantes no le quedará duda alguna de que es la primera! Esta ciudad lo tiene todo, desde Les Rambles a la iglesia de la Sagrada Família de Gaudí (declara por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad), y desde sus galerías de arte y museos de primera clase mundial a sus orígenes Romanos. Barcelona es un destino fantástico con un legado cultural y una historia inigualables. Por último, no hay guía turística de España completa sin las Islas Baleares y Canarias. Las primeras se encuentran situadas en la costa mediterránea española y están compuestas por las islas de Ibiza, Menorca y, la mayor de todas, Mallorca. Mientras que las Canarias están situadas en la cálida zona del Océano Atlántico, delante de la costa del norte de África. Sin embargo, si lo que busca es diversión de verdad, la joya de la corona de los destinos turísticos españoles es las Islas Canarias. El Teide, en Tenerife, es la montaña más alta de España, mientras que la isla de Fuerteventura es la más arenosa de todas. Gran Canaria es un paraíso turístico, sin olvidarse de Lanzarote y sus preciosas playas. Habitado desde tiempos prehistóricos, este archipiélago volcánico dispone de una amplísima oferta, desde una magnífica vida nocturna a tranquilas poblaciones, y desde costas y playas pintorescas a paisajes casi lunares. Busque lo que busque para sus vacaciones, las Islas Canarias seguro que lo tienen. |