Guía de Viajes y de Hoteles de Portugal |
En el extremo sur occidental de Europa yace una tierra que a menudo cae en el olvido de la mayoría y que ha sido reducida a destino turístico: ¡Portugal! Lo que también supone una gran ventaja, ya que aquí podrá encontrar todo aquello que otros populares destinos turísticos le ofrecen, pero sin aglomeraciones, con menos comercialización y, en general, ¡más barato! Portugal se lo ofrece todo: desde el bullicio de una moderna y pintoresca capital, en la que lo nuevo y lo antiguo se funden con la más perfecta armonía, a las islas más tranquilas y vírgenes, pasando por montañas y llanos, a través de viñedos y praderas, y a lo largo de playas que se pierden en el horizonte infinito de sus líneas costeras. Portugal ha renacido de su estado de ‘cocina pobre’ y ha pasado a convertirse en un centro turístico maduro e inteligente, cuya abierta, hospitalaria y respetuosa sociedad da la bienvenida a todos y cada uno de los turistas que la visitan. Aquí no existe lugar alguno lejos del mar, lo que hace que el marisco, una de sus delicias autóctonas, se haya convertido en casi una obsesión nacional. No hay visita completa a Portugal que no incluya probar esta delicia, además de degustar sus refinados vinos y quesos locales, que le darán alguna que otra agradable sorpresa. A diferencia de muchas ciudades modernas, Lisboa, con su rica historia, tranvías amarillos y estilo de vida latino, ha retenido todo su encanto original. Pasee sin destino fijo por el centro de la ciudad, reconstruido en el siglo XVIII, y a continuación súbase a un tranvía y diríjase a Belém, hogar de las famosas tartas de crema conocidas como ‘pastéis de nata’. El Algarbe, famoso por sus preciosas playas, forma la franja costera del sur del país. La mayoría de sus visitantes llegan y se marchan por el aeropuerto de Faro, el cual se encuentra céntricamente ubicado, permitiéndole acceder a los encantadores destinos turísticos que se esparcen por la deliciosa costa de esta región. Oporto (Porto) se encuentra perfectamente situada en la desembocadura del Río Duero, en cuyas riberas crecen las uvas que han hecho famoso al oporto, el vino que ha sido bautizado con el nombre de la segunda ciudad más importante de Portugal. El que una vez fue el lugar donde se libró la mayor de las guerras napoleónicas, acoge hoy encantadores paseos que lenta y pausadamente conducen al río que define la esencia de esta región. Suba a una de las embarcaciones y remonte el curso del río, desde donde podrá disfrutar de vistas realmente extraordinarias. Coimbra es el centro académico por excelencia de Portugal, y, durante un breve período, también fue su capital. Es la cuna de una de las universidades más antiguas de Europa, además de ser un centro arquitectónico realmente excepcional. Relájese y escuche el Fado tan particular de Coimbra, la música tradicional portuguesa. Alentejo, también conocida por sus quesos y jamones ahumados, no sólo es la mayor región productora de vino del país, sino que también es aquella tierra cuya historia continúa viva en sus pueblecitos medievales y monumentos prehistóricos. Visite Évora, una histórica ciudad cuyos orígenes se remontan más de dos mil años en el tiempo y en la que podrá admirar una amplia variedad de monumentos Romanos. El paisaje más variado y sorprendente de todo Portugal se encuentra, quizás, en la isla sub-tropical de Madeira. Costas pintorescas y espectaculares acantilados desde podrá llegar a los pies de las montañas. A la salida de cada una de las curvas de sus rurales carreteras encontrará panorámicas vistas de plantaciones de plátanos, viñedos, verdes valles y algunos de los más antiguos bosques de toda Europa. Desde su soleada y sofisticada capital, Funchal, hasta la apacible costa del norte, este es un destino que jamás dejará de impresionarle. Portugal cuenta con tantos y tantos sitios interesantes que visitar que no existen palabras para describirlo. Lo mejor, claro, es que venga a verlo con sus propios ojos. |